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lunes, 4 de abril de 2011

ENHORABUENA HÉCTOR

Pues si, es un motivo de satisfacción que un miembro de la familia (primo en este caso para más señas) se estrene en una media maratón, en Madrid, y con su hermano de escudero fiel, mas su primo (un servidor) y un amigo (Juan) de testigos presénciales y acompañantes del paseo de 21 Km., ahhhh, se me olvidaba, más Jan (Corriendo se llega lejos), que nos acompañó los primeros kilómetros.

Ha sido una mañana muy completa, porque además me ha servido para completar un entreno largo de cara al MAPOMA el próximo día 17, y me explico, al terminar la media he vuelto para mi antiguo barrio en Madrid, (donde dejé el coche), zona de la Dehesa de la Villa aprox., corriendo, total, han sido 6,5 km. Más, que sumados a los 21 de la media pues 27, 5….. para la saca que diría un castizo.

Bien de sensaciones pues el ritmo no ha sido muy exigente y parece que las piernas recuperan bien y no siento una sensación de carga excesiva cosa que me da cierta confianza.

Empecemos por el principio, pues como en casi todas la carreras a las que uno acude desde que es “BLOGUERO”, es de obligado cumplimiento una “mini” kedada previa para saludar y cambiar impresiones más alguna foto con los colegas de la comunidad bloguera, foto que adjunto (como siempre robada), en este caso a Jaal (corredor incierto), espero que me sepas perdonar el pequeño hurto, por cierto que no se me olvide, bajando por Serrano un espectador solitario en la acera animando, miro y… pero leches si es Raúl (El Rincón del Korrecaminos), le tocaba currar, que alegría oyes, no puedo por menos que acercarme a la acera para darnos un abrazo de complicidad, esto de la comunidad bloguera, cada día mola más.



Pero el día era el día de Héctor, mi primo, que se iniciaba en esta aventura, todos sabemos que Madrid no es precisamente el mejor sitio para encontrar perfiles suaves, pero desde que la media termina en Retiro y la entrada se hace por la puerta del Ángel Caído, vamos como una penitencia, porque si vas a hacer tiempo, ya te puedes reservar porque la cuestecita se las trae, pero si eres más o menos novicio en estas lides y llegas justito al 19, como un tiro de gracia en la nuca, vamos para rematarte, que duuuuuura, no llegas nunca al jodio Ángel.

Pero al final objetivo cumplido y más o menos en el tiempo previsto, que eso para ser la primera vez es buen síntoma pues da sensación de controlar tus ritmos durante la carrera, bien también por eso Héctor.

Así que pasadas las dos horas (el tiempo lo de menos, pues el objetivo ayer era otro), nos presentamos en la recta de meta los “CINCO” magníficos, a saber, mi amigo Juan (fiel acompañante toda la carrera), Dani (Zapatillas con Velcro), con su vástago (Saúl) en brazos pues no se quería perder el momento jejeje, un servidor, y el “prota” de la mañana (Héctor), abrazo de complicidad al pasar la meta de todos los componentes de grupete y…………….

BIENVENIDO AL CLUB HÉCTOR